viernes, 16 de noviembre de 2012

ANOTHER ONE





Cualquiera que nos viera pensaría que hasta nos llevamos bien, sólo hacía una hora que la situación era completamente diferente.

Tal y cómo dejamos escrito, hoy tocaba segunda salida para algunos y primera para otros, en cualquier caso numerosa y prometedora reunión.
De salida Sres. Castro, Rojas, Rico, Moreno, Murillo, Ortiz, el amigo Alfredo y un servidor.

Recorrido. Ciempozuelos, la Nueva (de aquí en adelante el Molenberg de San Martín...), Chinchón y vuelta por el Nuevo Chinchón.

Ritmo vivo de salida como suele ser costumbre y tras una leve indisposición del Sr. Castro enfilamos la subida al Molenberg a ritmo más que interesante. Precisamente ese ritmo es el que provoca la selección en el muro aunque al final del mismo se produzca le reunificación.

De seguido viene la zona Rico, de la que ya hemos dado cuenta en anteriores posts.
Para los que no nos sigan habitualmente señalar que se trata de una zona de bajada (el Frascuelo en sentido inverso a la subida) con alguna que otra curva, a la que se llega tras una ligera bajada. Bien.
En ella se encuentra especialmente a gusto el Sr. Rico y rara ha sido la ocasión en la que pasando por allí no lo haga en cabeza.
Dependiendo del día y ganas que tenga, así como el resto en secundarle, esto puede traducirse en batalla o no.

Sabiéndolo de antemano le dejamos ir. Pero no se qué tendrá verle delante que por muy detrás que vayas sientes la necesidad de ir a por él.
Es un provocador nato, vamos.

El Sr. Moreno sí que ve la jugada perfectamente y tira detrás, mientras Muri y un servidor vamos avisando de la que se avecina mientras remontamos puestos y nos ponemos en pursuit-mode.

A la altura del cruce de la alcoholera y no sin esfuerzo por nuestra parte, contactamos con el susodicho.
Por detrás vienen tirando para enjuagar la diferencia los que se han quedado cortados.
Bueno, todos menos el Sr. Rojas al que nada le hace sudar.

Se establece una diferencia bonita y a jugar.
La idea, llegar con esa diferencia al pié de la siguiente subida hacia Chinchón. Y así fué.

Nada más empezar a subir Moreno y Rico se dejan caer y nos vamos Muri y el que suscribe. Por detrás el amigo Alfredo viene dándolo todo y con fuerza y capacidades.
Alcanza a los dos anteriormente nombrados y tras un impasse sigue tras nuestro.

Por nuestra parte vamos jugando con la distancia y manteniendo referencia visual para no relajarnos en exceso pero sin entrar en zona roja.

No nos sale mal del todo, coronamos, soltamos, volvemos a reunificar.... y en estas un coche para para preguntar una dirección.
Justo en ese momento llega el Sr. Rojas. Sabedor de que la mañana amenaza tormenta, no para. "Ya me cojerán más adelante....".
Y en ese momento subían de vuelta los Sres. Moreno y Rico. Éste último al vernos parados en la rotonda al resto, no duda. Pa´lante!!!.

Otra vez pursuit-mode. Aunque algo más tranquilos en esta ocasión. Las patas ya llevan kms. y esfuerzos encima y el terreno es bueno para "la caza".
En estas se nos une una grupeta de Ciempozuelos con bastantes aires de grandeza y muy poca educación.

Pasan hacia delante sin decir absolutamente nada mientras el ritmo empieza a decrecer pese a la presencia que gastaban encima de la bici.
El Sr. Murillo, que para estas cosas es muy sentido, me hace el comentario y afirmo.
No cuesta nada soltar un "buenos días" y contar algo, que digo yo....

Entre la chulería de estos y que la distancia empieza a aumentar con respecto a los otros, nos ponemos manos a la obra inmediatamente.
Avivamos el ritmo de manera notable hasta enlazar con ellos en cuestión de pocos kms.
Por supuesto el ritmo ya no iba a decaer.

Los invitados se colocan a rueda y ya no sabremos nada más de ellos.
En un principio pensábamos que su idea era subir el Kappelmuur a ritmo allegro para ponernos en nuestro sitio, pero finalmente no fué así.
Justo en la base del muro se despiden, ahora sí, y siguen su camino.
Bajo mi punto de vista creo que algo de respeto nos ganamos.
Todo esto sin ir uniformados, como comentó el Sr. Moreno. El día que estrenemos ropajes... uff!!!.

Pero como digo siempre.... quedaba el Muur de Gramont!!.
Como el ritmo que traímos era tan alegre, no era cuestión de dejarse llevar y ralentizar la marcha.
Por delante Muri y Alfredo. Un servidor de puente y al mirar hacia atrás veo que se juntan pero no tienen intención de seguir con ese ritmo.
Tiro hacia delante hasta contactar y a calentarnos cómo es debido.

Subida inicial a ritmo. Muy bueno gracias al amigo Alfredo. Empezamos a relevarnos con idea, al menos por mi parte, de subir a ritmo. Hete aquí que se rompen hostilidades al poco rato y ya nada importa....

Nueva reagrupación, ahora sí, definitiva y a buscar los recuperadores.




Pese a la ausencia de algunos miembros por cuestiones ineludibles pudimos disfrutar de un gran post y del merecido descanso.

Hasta la siguiente, of course!!!.


Saludos.

DavidP.


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