Mientras se encuentra en plena disputa la Vuelta a Suiza y tras e gratísimo sabor de boca dejado por el Dauphinè Libere, nos encontramos en plena época pre-Tour a falta de pocas semanas del inicio del mismo en Leeds.
Y tras las dos carreras anteriormente mencionadas que sin duda sirven como referencia obligada de cara a saber cómo llegan los favoritos, se han despejado muchas incógnitas de principio de temporada.
En primer lugar, y por suerte para el aficionado, parece ser que este año no habrá monólogo Sky. Al menos no como en los años anteriores.
Tanto Alberto Contador como Vincenzo Nibali parecen llegar en condiciones óptimas a la cita francesa. Y conociendo el carácter de ambos en la carretera, al menos hay garantías de ver espectáculo.
Otra cosa será cómo se desarrolle la carrera.
Froome no sale bien parado, ni mucho menos, del mini-Tour celebrado la pasada semana en tierras francesas.
A su pobre rendimiento deportivo debemos sumar la confirmación de que fue autorizado a utilizar inhaladores (corticoides) en el reciente Tour de Romandia.
Ojo, autorizado por el propio Director de Carrera (!!). Cosas de la élite, supongo.
Esta notificación coincidió con el peor rendimiento de Froome en la Dauphinè. Cosas del ciclismo, supongo.
El caso es que el ciclista con peor estilo encima de la bicicleta, al menos recientemente, y que no sabe dar pedales si no es mirando su SRM, llega con la confianza justa, firmando el peor inicio de temporada en su reciente trayectoria y viendo como su principal rival se encuentra, al menos, a su altura. Cosa que no se veía en los últimos años.
Porque si Contador, que parece haber recuperado su nivel pre-solomillo y lleva un inicio de temporada espectacular pese a la derrota in-extremis en Dauphinè, está en forma (quizás demasiado.... veremos cómo recupera de estos esfuerzos y qué tal llega al mes de julio), Nibali es el que despierta más ambiguedades.
O bien está midiendo escrupulosamente sus esfuerzos, amén de diferentes temas personales y deportivos en forma de nacimiento de su hija y caída de la bici respectivamente, ó está claramente un punto por debajo de los otros dos.
En Dauphinè, pese a intentarlo como él suele, apenas ha sido una sombra del ciclista que apabulló en el pasado Giro d´Italia.
Precisamente esos esfuerzos que hemos podido disfrutar por televisión son los que pueden pasar factura el próximo mes cuando los ciclistas encaren la última semana de la Grande Boucle.
Y detrás de ellos, el abismo.
Por mucho que nos quieran vender, que nos venderán, diferentes opciones ó la sorpresa anual en forma de escapada consentida ó demás, no hay actualmente ningún ciclista siquiera un peldaño por debajo de estos tres.
Cierto es que Talansky ha dejado muy buenas sensaciones en Dauphinè lo que unido a su juventud y a la fortaleza de su equipo (con un Hesjedal que posiblemente no volverá a ganar una Gran Vuelta pero sí que ayuda a otros a ganarlas por no hablar de la temporada de primavera que suele marcarse....) lo presentan como una alternativa a corto-medio plazo.
Otro que va camino de eterna promesa y ya vistió el maillot blanco de Mejor Joven en el Tour es Tejay Van Garderen.
Ganador de varias carreras de prestigio de una semana, su propio equipo sigue confiando en el neo-profesional Cadel Evans de cara a luchar por la general. El propio Evans está corriendo en Suiza sin guardarse nada......
Así como Jurgen Van Der Broeck, podio en Tour y Dauphinè pero siempre dejándose llevar, sin tomar iniciativa alguna y minimizando pérdidas en las etapas de alta montaña.
Únicamente dos jóvenes, Roman Bardet y Adam Yates, dejan una gratísima impresión acrecentada por su su juventud y descaro en la carretera. Han corrido como dos auténticos veteranos y peleado por la victoria siempre que han podido.
El primero sí acudirá a la cita francesa mientras que el segundo lo hará a la Vuelta Ciclista a España.
Y así podríamos seguir con una lista más que notable de ciclistas que podrían estar ahí, que seguramente harán Top-10 en los Campos Elíseos pero que juegan en otra liga.
Esperemos que al menos, y tras comprobar el año pasado gracias a Movistar en los Pirineos y este año en las diferentes carreras, que el equipo SKY es batible cien por cien, se decidan a animar la carrera y presentar alternativas valientes.
Terreno, del que hablaremos más adelante, tienen más que de sobras.
Tras pasar noche en Guadarrama por problemas a última hora con el alojamiento que fueron subsanados con prontitud y rapidez por Julio, del Hostal La Maya, a las 8 de la mañana salíamos de Cercedilla mientras los valientes ultrarunners se enfrentaban al reto de ser ó no ser supervivientes en el Maratón Alpino Madrileño.
Mientras ellos buscaban el Alto de las Guarramillas, nosotros el Alto de El León en dirección completamente opuesta.
Y como siempre que uno sale de Cercedilla, cuestón. Pero de los buenos, de meter molinillo.
Ni que decir tiene cómo nos sentó después de las algo más de 20 horas acumuladas de bici de los dos días anteriores.
Lo mejor es que tras el sopor inicial la pendiente se relaja y nos deja contemplar una maravillosa vista del Valle de Cuelgamuros y parte del Guadarrama bajo.
Gozada total para los sentidos y que aprovechamos para homenajearnos en forma de foto.
El día de hoy se prometía más relajado pese a los 140 kms. y 1.900 mts. positivos que teníamos por delante.
Eso sí, el terreno no daba tregua y la subida hasta el Collado de la Mina nos exige más de lo esperado y recordado.
Aún así el ánimo se mantenía por todo lo alto. El día acompañaba.
Es un privilegio amanecer pedaleando por la sierra madrileña.
Parada para hacer aguas menores y comenzar la subida a Abantos, última dificultad de consideración del día.
Fue dificultad y fue considerable, pero como todo, se superó.
Desde aquí y tras retratarnos con motivo de la ocasión, descenso por la destrozada carretera que en otro tiempo atravesó la Vuelta Ciclista a España en diversas ediciones y tras un desvío a derechas, 17 zetas de puro singletrack dónde poder gozar de la bici de montaña en estado puro......
Tras divertirnos como unos críos y un leve arrastrón a cargo del sr. Castro, enfilamos el camino a Zarzalejo y tras refrescarnos en la fuente del pueblo salimos en busca de Robledo de Chavela.
Estábamos percatados de la "trampa" sita junto a la vía del tren, pero una cosa es la teoría y otra la práctica.... Joder con la puta rampa!!!!.
En Robledo parada para avituallar en condiciones y aventurar la hora de llegada a familiares y amigos.
Breve tramo de salida por carretera dirección Cebreros y al poco pista a la izquierda que nos llevará en una sucesión de vaivenes sube y baja hasta la M-501 y el tan deseado embalse de Picadas.
Desde aquí el terreno se vuelve seco y árido pero bastante más llevadero en lo que a desnivel se refiere con lo que ello supone para nuestros maltrechos cuerpos.
Vía verde del Ferrocarril que compartimos junto a los participantes de los 88 de Mammoth y que nos deja, tras una travesía agradable y en la que nos quedamos con ganas de saltar al embalse bici incluida, al pie de Aldea del Fresno.
Saliendo de Aldea y tras subir unos metros, mix de pista y sendero bastante juguetón y con algún peralte que no pudimos aprovechar del todo debido a la escasez de fuerzas.
Bajada rápida hasta Villamanta y decidimos salirnos del track para comer allí.
La idea primigenia era comer en Aldea, pero al ir tan bien de tiempo, decidimos posponerlo unos kilómetros.
Aquí ya tocaba merecido homenaje.....
Hora de parada. Cervezas, Cocas, paella, doble café en el caso del sr. Moreno.... a lo loco!!!!.
Confirmamos el adelanto a la hora prevista y nos relajamos antes de la Chucha Time.....
16.30 hrs.
En marcha....... Oh my God!!!!!!!!!.
No words.
Tirando de coco poco a poco seguimos haciendo camino, en el caso de los sres. Castro y Moreno con los pies devorados por el calor.
Nueva parada en la fuente de El Alamo. Vaya sitio para librar una batalla......
Seguimos dirección sur hasta llegar a Torrejón dónde Pies Rotos Moreno"se tira el pisto" e invita a unos helados. Thanks a lot!!.
Estamos a escasos 15 minutos de la Fuente de la Teja y a 30 minutos de Valdemoro!!!!!.
Salimos con mucha calma y disfrutando lo que nos queda hasta llegar a la Fuente de la Teja, kilómetro 250 de la ruta, en nuestro caso punto final de la misma.
Refrescamos, nos abrazamos y pa´l pueblo.
Terreno de sobra conocido el que nos lleva al pie de la M-423 para desviarnos algo más adelante y enfilar camino El Barrio.
A partir de aquí cada uno disfruta como puede y a su manera.
Son sentimientos que sólo pueden entenderse desde el sacrificio de preparar algo con mimo, dedicar buena parte de tu tiempo a ello, lucharlo, pelearlo y finalmente poder llevarlo a cabo.
Y lo más importante, compartilo con gente que quieres, te quiere y entiende "esta" manera de ver la vida.
EPÍLOGO.
Tal y cómo Oscar Romero califica en su página web (www.m500.es), hacer esta ruta en 5 días es duro. Hacerla en tres no lo es menos, y hacerla non-stop, como se hizo a principio de la primavera, nos parece demencial.
Pero ahí está la gracia de los retos, en la manera de abordarlos.
Creemos haber acertado con la división y organización de las tres etapas.
La primera de ellas, eminentemente rodadora y en la cual puedes acumular muchos kilómetros a buen ritmo justo antes de plantarte a los pies de la Sierra Pobre.
Desde aquí y hasta que se llega a El Escorial el terreno es de Montaña. Con mayúsculas y con lo que ello implica.
Cambio de terreno y también de paisaje, lo cual siempre agrada.
Si bien es con diferencia la más dura de todas, también es la más bonita.
Los valles (Hiruela, Puebla de la Sierra....) antes de enlazar con la carretera que baja del Puerto de La Puebla, las vistas desde la bajada del Tres Provincias, con la A1 y Somosierra a tus pies así como parte del inicio de la Sierra del Guadarrama, las vistas desde la Horizontal de todo el Valle del Lozoya, los pinares antes de llegar al puerto de Malagón y tantas y tantas cosas más, hacen que merezca muy mucho la pena el esfuerzo y constatan que tenemos una maravilla de terreno al lado de casa con muchísimas posibilidades y aún por explorar.
Cuidémoslo y disfrutémoslo.
Y finalmente para el último día, parte de la Sierra Oeste de la Comunidad, con sus montes bajos, el paso por la presa de Picadas y las vistas desde la Vía Verde del Ferrocarril hasta volver a los parajes semidesérticos y áridos que comienzan en Villamanta y finalizan, en este caso, en nuestro Valdemoro.
GRACIAS a Oscar Romero por idear, plasmar y dar a conocer la ruta a todo el mundo, así como por ayudarnos en todo lo que se le requirió. Un placer.
GRACIAS a Carlos Córdoba,4 Biker Shop y a Javier de El Barrio, por haber ayudado, creído y colaborado en este proyecto.
En los tiempos que corren esto es más preciado que el oro. Confiamos haber estado a la altura de lo que esperábais así como confiamos en seguir contando con vosotros.
GRACIAS a todos los amigos, tanto presenciales como online, que con sus ánimos y mensajes han ayudado a mantener la ilusión y confianza en el proyecto. Ayudan y mucho!!!.
Especialmente los Turnos 1 y 4 del Parque de Bomberos de Parla, los mejores turno y turno-espejo respectivamente en los cuales uno pueda trabajar (opinión totalmente subjetiva aunque cierta.....).
Orgullosos de pertenecer a este colectivo.
GRACIAS al sr. Iñiguez y al sr. Sánchez Agudo por los préstamos en forma de Go-pro y que servirán para editar un video conmemorativo del proyecto que verá la luz próximamente.
GRACIAS a la Grupetta. A todos y cada uno de ellos. A los que vinieron y a los que finalmente no pudieron o se atrevieron. A todos por estar ahí, dispuestos a echar una mano cuando se necesita.
Y por encima de todo y todos, y sintiendo tener que discriminar, a Juanjo Ortiz.
Has sido nuestro jugador número 12. Sin ti, no te quepa la menor duda, no hubiéramos podido acabar, especialmente un servidor.
No tienes ni idea de lo reconfortante que era verte al acabar el día.
GRACIAS a Carlos Rico por mantener, pese a todos los años que lleva montando en bicicleta, la ilusión que tiene por el ciclismo.
Es el Ciclista del grupo, sin duda alguna. Cuando se busque en el diccionario esa palabra, DEBERÍA venir una foto del sr. Rico acoplado sobre la flaca para que los jóvenes vieran cómo se monta en bicicleta.
Has nacido para el ciclismo y para alegrar a todo aquel que tienes a tu alrededor.
Enhorabuena por ser cómo eres y por haber superado todo lo que has superado en los últimos tiempos, que me consta no fue nada fácil.
Sólo espero poder jubilarme dando pedales juntos.
GRACIAS a David Castro, sin duda la sorpresa, agradabilísima, de la ruta.
Tras su carrerón y debut en el Maratón de Sevilla el pasado mes de febrero ha sabido contemporizar, descansar y preparar en condiciones este proyecto, descubriéndose como un excelente navegador y una referencia a la hora de decidir por dónde tirar.
Físicamente ha llegado perfecto, sin mucha carga y con ganas de bici. Teniendo en cuenta el poco tiempo que lleva montando y la diferencia con el resto de los que salimos de Valdemoro, no cabe sino alabar su adaptación a la bicicleta y sus ganas de sumar, divertirse y pasarlo bien. Fichaje cholista de los buenos. El día que abra los ojos del todo, no habrá quién lo pare!!!.
GRACIAS a Rafa Salmoral por preguntar y por dudar, por no dejar de interesarse por todos y cada uno de nosotros, por ayudar cuándo puede y cuándo no, por haber arrimado el hombro desde el principio y haberse ilusionado con esto tanto como el que más. Por ser pieza clave de esta Grupetta y Presidente de Honor.
Espero que esta "excursión" le haya confirmado lo que el resto ya sabíamos hace tiempo. Tiene un motor incombustible y puede hacer lo que se proponga.
Un éxito haberlo recuperado para la vida deportiva después de un parón que parecía hacerse eterno.
Ahora no hay que parar, sólo descansar para tomar carrera de nuevo...
GRACIAS a Mariano Moreno por ser una garantía para cualquier tipo de proyecto que se le proponga.
Dije hace tiempo que esta ruta estaba pensada para él y no me equivoqué. Tras el calvario de lesiones y molestias varias que arrastra desde julio del año pasado y que le impedían correr, ha sabido mantener la cabeza fría (nada fácil en nuestro caso....), se mentalizó desde el pasado mes de enero en preparar con mimo y cuidado el proyecto y a fe que lo ha hecho bien.
Cuando está mentalizado y motivado no hay quien lo pare y es más fuerte de lo que él se cree.
Duro como el pedernal, es una referencia a la hora de afrontar retos de muchas horas, dónde sin duda se crece y saca lo mejor de sí mismo.
Personalmente no podríamos ser más diferentes. Deportivamente me cuesta imaginar una prueba en la que no lo quisiera a mi lado.
Por si fuera poco hemos conseguido que sonría bastante más veces de las que incluso él pensaba...... Y se agradece!!!.
Con estos tipos se puede ir al fín del mundo.......
GRACIAS a mi familia por aguantarme, especialmente a Ella.
Por aguantar mis salidas, espantadas, paranoias y demás y esperar siempre con la mejor de las sonrisas.
Vosotros tenéis buena culpa de todo esto.
Hay gente que pasa toda su puñetera vida buscando "algo" que otros llevamos disfrutando casi 20 años.....
P.D.: Una vida sólo vale la pena si se ha vivido con intensidad.
Saludos.
Amanece en El Atazar.
Dolores "all around the body" y la cabeza se pega con fuerza a la almohada. Sólo de pensar lo que espera y la brutal salida "a balón parado" hacen que demos más de una vuelta a la cama.
Al final es lo de siempre. Cuestión mental. Para arriba y al lío!!.
Rápido y frugal desayuno en algunos casos y no tan rápido y no tan frugal para otros, a eso de las 7.30 am. partimos en dirección al Pico Tres Provincias, primera minietapa del día (Carlos Rico dixit).
Desde allí las otras dos minietapas, Lozoya y Cercedilla.
Pequeños juegos mentales y fundamentales en el ultrafondo para intentar engañar a la mente y que no piense en los 160 kms. y casi 4.000 mts. positivos que tenemos por delante.
Terreno de alta montaña, duro, complicado y que no dará ni un sólo respiro. Lo que esperábamos......
Al poco de salir, y pese a su trasnochador trabajo del día anterior, el sr. Salmoral pincha. Parada nada agradable a la sombra tras la enorme sudada para retormar el track original de la ruta que hace que nos quedemos helados.
Partimos al rato y ya no pararíamos hasta el pico que marca el límite entre Madrid, Segovia y Guadalajara.
Ritmo conservador tratando de guardar la mecánica y volver a conseguir sensaciones en las piernas, las cuales sin duda notan las más de 10 horas de pedaleo del día anterior.
Todo esto no sirve de nada en los últimos 3 kilómetros de ascensión.
Aquí sólo vale la fuerza, física y mental, de cada uno para poder superar las terribles y técnicas rampas que nos dejarán al pie de nuestro primer objetivo.
El Dios Eolo no está hoy de nuestro lado y nos obliga a bajar ASAP (as soon as possible... usease, echando leches!!!).
Ahora viene lo mejor. 8 kilómetros de bajada endurera pura y dura de esas que destrozan muñecas, brazos, espalda, cuello y todo lo que lleves encima, jeje.....
Eso sí, disfrutona como pocas!!!!!.
A pesar de que el sr. Rico decida ir por delante de la bici en una curva, completamos la primera y más difícil parte sin incidencias notables.
Poco antes de coger una pista bastante más sencilla y por tanto menos divertida, el sr. Castro comienza con su recital de pinchazos.
Nos percatamos todos del incidente y paramos. Esto que escrito es fácil no lo es tanto en marcha.
Dada la distancia de seguridad a dejar con el ciclista que te precede, el viento reinante y el propio del descenso, la dificultad del descenso y la imposibilidad de ir mirando hacia atrás, hace que en ocasiones pasen unos kilómetros hasta que puedas darte cuenta de que vas sólo.....
Reparación, recomposición ósea y muscular y a seguir disfrutando.
En la parte final podemos disfrutar del nacimiento del río Duratón y en unos minutos, tras una subidita nada bien recibida, nos plantamos en el puerto de Somosierra con la intención de avituallarnos cómo es debido.
Cocas, barra de pan, jamón serrano y la práctica totalidad de los donuts de chocolate disponibles en el establecimiento (cierto y literal..... había que ver la cara de la cajera cuándo me cobró....), hacen las delicias del personal.
A estas horas ya sabíamos que el día sería fresco. Buena noticia. Sólo habría que lidiar con el tramo Lozoya-Rascafría en las horas centrales del día y a menor altitud ya que lo que restaba hasta Lozoya, la famosa Horizontal ( Transversal para el sr. Moreno.... ) y sus 25 kms. rondan los 1.500/1.700 mts. de altitud.
Pero como la idea era llegar sobre las 15.00/15.30 hrs. a Lozoya tampoco suponía un problema..... Ja.
Salimos en suave ascenso y ganando altura gradual y agradablemente con un par de paradas no técnicas en las que aprovechamos para desalojar de nuestros cuerpos y re-untar los mismos de vaselina y demás.
Evidentemente hay documentos gráficos de estos hechos pero los hemos considerado irreproducibles por el alto contenido erótico-sexual de los mismos y por el daño a la sensibilidad que los mismos producirían.
En estas estábamos, buscando la tan ansiada Horizontal, que al poco de enlazar con la misma el sr. Castro pincha las dos ruedas a la vez. Tal cual.
Mientras el sr. Moreno y un servidor circulábamos por delante y nos percatamos unos 600 mts. de descenso más adelante, el resto se pone manos a la obra.
Tras esperar un rato más que considerable y sopesar tener que volver a subir lo descendido con anterioridad decidimos ir en su busca.
Justo al llegar terminan. Suele pasar......
Unos 20 minutos perdidos y Lozoya cada vez más lejos. Thriller moment.
Empezamos a considerar una realidad más que probable que se nos haga de noche, amén de tener que acortar la parada para comer en Lozoya.
Volvemos a ponernos en marcha en un terreno "que se deja". Incluso en algunos tramos el viento ayuda y la velocidad es alta pese a las protestas de algunos que consideran excesivo ese ritmo y la factura que ello podría conllevar más adelante.
El silencio se instala durante unos kilómetros en los que hacemos camino aunque a nosotros nos parezca que Lozoya lo han movido de sitio.
Lo bueno de conocernos como nos conocemos es el respeto y la confianza que a su vez nos tenemos.
A eso de las 17.00h (!!!) de la tarde aparcamos las bicis en Lozoya junto al bar dónde unos bocatas de lomo y queso con sus correspondientes jarras de cervezas y Cocas, hacen que volvamos a vernos como lo que somos. Unos tíos!!!.
Empieza a subir el ánimo. El sr. Moreno confirma que a las 20.00 hrs. como muy tarde estamos en lo alto del Puerto de Cotos, clave para saber si llegamos ó no de noche.
Siempre nos quedaba, en el peor de los casos, la opción de bajar a Cercedilla por carretera desde el Puerto de Navacerrada.
Pero como suele pasar en estos casos, la parada fue providencial. Retomamos fuerzas físicas y mentales.
Tranquila y calurosa travesía junto al embalse hasta llegar a Rascafría y desde allí, puente del Perdón y Presillas mediante, a comenzar la aterradora, durísima y complicada subida a Cotos.
Al poco de empezar, parada y foto conmemorativa del sitio exacto dónde semanas atrás el sr. Rico casi pierde la bici merced a una caída en la cual su vehículo fue a parar al río sosteniéndose únicamente por una rama y la voluntad del sr. Salmoral que raudo y veloz acudió al rescate.
Tal y cómo dice el protagonista, lástima no haberlo visto.....
Una primera parte ratonera, técnica y divertida junto al río nos conduce, tras pasar al otro lado a otra bastante menos divertida.
Algo de pista con repechos "calentadores", giro a derechas y trialera va y trialera viene.... Y qué trialeras!!!.
Toca tirar de repertorio, riñones y lo que puedas. Dios qué manera de sufrir.
Al final, como todo lo bueno, se acaba. Aunque pagas el precio a base de bien.
Último kilómetro por la M-604 y coronamos el tan ansiado Puerto de Cotos.
Y tal y como dijo el sr. Moreno, on time!!.
Ocho en punto de la tarde y hora y media de luz para bajar por el Gr, subir Fuenfría y bajar hasta Cercedilla. Suficiente.
Al paso por Venta Marcelino los sres. Salmoral, Castro y Rico deciden parar para beber algo.
Tanto Mariano como yo pensamos que cogerían Coca de la máquina y seguiríamos para abajo. La sudada había sido importante y quedarte parado a esas horas (pese a que no hacía frío nosotros sí que lo teníamos después de llevar todo el día encima de la burra.....) con lo que llevas encima, suele ser peligroso.
Así se lo decimos pero insisten en que deben de parar. La subida había hecho mella en las mermadas fuerzas y necesitan ese respiro. Ok.
Coca once again!!. Salimos en busca del Gr. Técnico, estrecho y en las condiciones en las que íbamos, complicado.
Apenas unos metros de descenso y compruebo cómo el sr. Rico intenta no perder el equilibrio en una zona "complicadilla". Por desgracia no lo consigue y da con sus huesos en el suelo de una manera bastante fea, saliendo por encima del manillar.
Inmediatamente desmontamos y acudimos en su ayuda. Rafa se percata que tiene luxado el dedo meñique izquierdo. En concreto se ha quedado mirando pa´rriba.....
Intentamos mantener la calma y recomponernos.
Tras el susto inicial volvemos a Venta Marcelino para que Juanjo, quien en esta ocasión venía acompañado de Blas y Oscar, recoja a Carlos en el puerto.
Mariano le comenta a Carlos que debería colocárselo. En un primer momento no lo ve claro, pero tras la confianza mostrada por el primero, finalmente lo hace y se queda más ó menos bien.
Destacar que el sr. Rico es famoso por la triste arquitectura de la que hace gala en sus extremidades superiores. Al menos no desentona con el resto del conjunto......
Lo que viene a continuación es una sucesión de tiritonas, cansancio acumulado y agotamiento cuasiextremo que hacen que nos faciliten alojamiento en el bar pese a que el comedor ya estaba cerrado.
Le damos a Carlos toda la ropa de abrigo de la cual disponemos, que tampoco es mucha, y a esperar.
El coche de apoyo estaba en Cercedilla, con lo cual en 15 minutos están arriba.
Mientras esperamos y dado que la tarde avanza inexorablemente, se plantea la posibilidad de seguir por carretera hasta el Puerto de Navacerrada, bajar hasta la segunda revuelta desde dónde sale la subida a la Fuenfría, coronar y bajar, ya de noche, hacia Cercedilla.
Opiniones diversas y fuerzas mermadas, acabamos concluyendo que la mejor opción es continuar hasta Cercedilla por carretera, relajarnos en Cercedilla y disfrutar de la compañía grupettera en la tarde de hoy en el incomparable marco del Asador de Angel.
Vertiginoso descenso al atardecer hasta el privilegiado lugar en el que está enclavada la villa serrana..
Dicho de otra manera, uno de los motivos por los que uno hace cosas cómo estas y uno de esos momentos que se permanecen en el disco duro.
Llegar a Cercedilla, encontrarnos de nuevo con Carlos, ya con mejor cara, y poder saludar a Oscar, Blas y Juanjo ( por enésima vez, gracias por todo.... ), es la mejor manera de concluir un día al cual teníamos un respeto terrible y que hizo honor a sus números y orografía.
Lo habíamos superado a un precio muy alto, la pérdida del sr. Rico, pero viendo la caída y cómo se produjo, pudo ser bastante peor.
Sólo quedaba disfrutar de la velada y poder descansar para el último día que también tenía su miga.
Como siempre, lo mejor la compañía!!!!. to be continued.....
Mucho hemos escrito y hablado acerca de la M500.
Pues bien, tanto la ruta como la experiencia han estado a la altura de lo esperado.
Aventura, incertidumbre, percances mecánicos y físicos, sobreesfuerzos inimaginables para algunos hace sólo unos meses, dolores y molestias en sitios desconocidos, compañerismo, tensión, calor, frío, etc......
Y sobre todo y por encima de todo, una agradable sensación de querer volver a repetir. Buena señal.
Vamos a intentar, ya con el paso del tiempo y la perspectiva que da el mismo, desgranar tres días en los cuales pasó de todo.
A las 7 de la mañana del viernes 6 nos encontramos en el Centro Lúdico de Valdemoro los sres. Moreno, Castro, Rico y un servidor esperando al sr. Salmoral quien confirma a los 10 minutos que se ha dormido y que le demos otros 15 minutos de cuartelillo....... mal empezamos.
Aunque a esas alturas no sabíamos lo que iba a empeorar la cosa...... Murphy´s Law.
Recordemos que teníamos por delante algo más de 200kms. hasta llegar a El Atazar antes de anochecer. Cada minuto nos hacía falta. Si bien es cierto que el terreno no era excesivamente complicado hasta llegar a las estribaciones de Valdepeñas, precisamente a partir de allí acumulábamos la práctica total del desnivel positivo del día (1.900mts. más ó menos.....) cuándo ya llevaríamos unas 8 horas encima de la bici.
En cualquier caso la tranquilidad imperaba en el grupo. El día era largo, no excesivamente caluroso y había muchas ganas. Lo teníamos de cara.
Finalmente un poco antes de las 8 de la mañana, y tras desearnos suerte y cero percances (!!!), enfilábamos los caminos de la Sierra Sur dirección Seseña en primera estancia y Aranjuez a posteriori.
Saliendo de la localidad madrileña famosa por sus fresas y cuando apenas llevaríamos hora y media de trayecto, primera bofetada en toda la cara. Y de la manera más tonta!!!.
Tras decidir bajarnos de la bici en un tramo embarrado por el regadío y mientras unos limpiaban la bici y otros ajustábamos el GPS, embestida del sr. Rico al que suscribe. Parece ser que sin intención..... (!!!).
Yo parado. Él recién montado en la bici, mirando hacia abajo para comprobar que no quedaba barro y zas...... al suelo.
Tras mirarnos con cara de besugo el uno al otro, comprobamos que estamos bien y exceptuando el golpe contra el suelo y el mosqueo por lo tonto del incidente, decidimos seguir.
Al montar en la bici compruebo que el cambio está completamente doblado. Cambio y patilla del cuadro que sostiene al mismo... De hecho se mete en los radios y a punto está de destrozar la rueda.......
Cara de besugos no, de gilipollas!!!!.
Por mi parte lo veo claro. Va a ser complicado seguir así y puede que la aventurilla haya acabado antes siquiera de empezar.
Entre todo lo sucedido en la preparación y esto, va a haber que hacer caso a las señales.....
Reseteamos al instante y tiramos de "momento Dakar".
En un primer momento se trata de intentar ponernos en marcha sea como sea!!!!. Luego ya veremos hasta dónde llegamos.
Desmontamos el cambio e intentamos, piedras mediante, enderezar la patilla para alinearla lo mejor posible y que no salte.
Tras varios intentos y unos 20 minutos, conseguimos que al menos tres piñones se porten decentemente.
Con eso y los tres platos creemos poder llegar hasta algún pueblo en el cual encontremos, bien una tienda de bicis ó un taller dónde mejorar la chapucilla.
El problema era cuándo tocaba bajar ó subir piñones, ya que empezaba a saltar de una manera nada agradable.
Lo único favorable era el terreno. La ausencia de desnivel de importancia nos beneficiaba.
Así pues nos ponemos en marcha con la mejor de las intenciones mientras al sr. Rico le remuerde la conciencia.
Destacar este hecho es de suma importancia, ya que todo aquel que tenga la suerte de conocerlo sabrá que no es fácil que esto ocurra.
Será que al final le importamos......
Pero como el día es largo, aún pueden pasar más cosas.
Apenas unos kilómetros después el sr. Salmoral advierte que a mi rueda trasera le pasa algo.
Paramos y comprobamos que se ha roto un radio..... (!!!). Murphy´s Law once again!!!!!.
Afortunadamente la rueda no roza en las vainas y no está muy deformada. Sacamos bridas y conseguimos sujetar el radio a otros tres de una manera más que aceptable.
A seguir... hasta dónde se pueda.
Señalar que llevamos algo más de dos horas de una ruta que se presume de 30 horas para los tres días.
Indudablemente y pese a que el ánimo no decaía en el grupo, ya empezaba a mosquear y El Atazar se veía cada vez más lejos.
Llegamos a Fuentidueña en algo más de 3 horas, tal y cómo habíamos previsto. Al fin una buena noticia.
Saliendo de allí el sr. Castro decide ocupar su cuota de protagonismo y se las ingenia para introducir la cadena doblada en el desviador con una tensión que ni los tornillos de un submarino.
Alucinante!!.
Otros 10 minutos parados hasta que conseguimos que todo vuelva a la normalidad.
Precisamente desde allí llamamos al hombre de la ruta. El sr. Ortiz.
Encargado de llevar ropa y comida tanto a El Atazar como a Cercedilla en las dos noches que pasaríamos fuera, valoramos la posibilidad de que recoja una patilla y un radio en 4 Biker Shop ó bien nos acerque su bici para que yo pueda seguir los días restantes, o bien nos la deje en Meco por dónde pasaríamos a la hora de comer.
Por temas personales este último punto es imposible en ese momento. Además yo considero viable llegar hasta El Atazar en esas condiciones siempre y cuando el radio aguante. El tema de los cambios más ó menos era llevadero. Tensando y destensando desde el manillar dependiendo del terreno que nos encontráramos, me apañaba.
Salimos dirección Norte buscando surcar toda la zona este de la Comunidad.
Ambite, Santos de la Humosa y Meco serían nuestros siguientes destinos de paso.
Terreno seco y duro, con la excepción del carril bici hasta llegar a Ambite, que se vió mitigado por la ligera ayuda del viento lo que hizo que llegando a Ambite acumuláramos los primeros 100 kilómetros.
Otra buena noticia!!!.
Allí tocaba la primera parada NO-técnica para refrescarnos con las primeras de las muchísimas Coca-Colas que tomaríamos a lo largo de los tres días.
Seguimos con ánimos renovados y haciendo cálculos con el fín de comer lo más lejos posible.
Finalmente llegamos a Meco a las 15.00 horas y decidimos parar.
Glorioso pincho de tortilla, dos rondas de Cocas y balance de la jornada hasta el momento.
Pese a todo lo sucedido seguimos vivos y con ánimos intactos. Algo más de 140 kilómetros y mucho más cerca de El Atazar.
Tras hablar con Emilio (4 Biker Shop), decidimos que finalmente Juanjo nos acerque su bicicleta por la noche.
Salimos de Meco en plena Chucha Time (dícese del período en el cual sientes un aplastamiento tal que sólo quieres estar tumbado y a ser posible, al fresco.... suele durar desde que comes hasta unas dos horas después, en el mejor de los casos).
La salida de la localidad anteriormente mencionada es, cuánto menos, soporífera.
Paisaje desolador, ausencia total de vida por todos lados, caminos y trigales que desprenden bofetadas de calor y cinco tipos a lomos de sus bicis totalmente empapados, quienes pese a todo no dejan de reir y decir gilipolleces con el fin de animarse unos a otros mientras sus estómagos intentan asimilar lo ingerido con anterioridad.
Las siguientes horas son un calco en cuanto a terreno y paisaje.
Algún repecho, alguna bajada que sube el ánimo y un "corte" en el terreno en forma de campo arado, que nos obliga a llegar a Casa de Uceda, ya en Guadalajara, por carretera. Cierto es que se agradece este tramo asfaltado después de los últimos kilómetros rizados y rebotones que dejaron nuestras espaldas y posaderas para el arrastre.
Saliendo de Uceda y mientras comprobámos el sr. Castro y yo el camino más adecuado a seguir, nuevo percance.
Bajada vertical y a los pocos metros me percato que el GPS ha saltado del soporte de manillar..... (!!!).
Media vuelta sin avisar ya que espero encontrarlo en medio de la pista, y para arriba.
Un par de reconocimientos arriba y abajo no dan el fruto esperado. Llamada del sr. Castro para averiguar qué hago y se presenta la Caballería al instante.
Toca jugar a exploradores...... A los 15/20 minutos de inspección el sr. Moreno (God Bless Him!!!!!) localiza el aparatito en cuestión.
Nueva puesta en marcha que ya empieza a nublarse y son algo menos de las 19.00 horas. Aún queda bastante desnivel y unos cuantos kilómetros antes de anochecer y ya hemos perdido mucho tiempo.
Afortunadamente desde aquí hasta El Atazar sólo paramos en Valdepeñas de la Sierra para aprovisionar sólidos y líquidos con los cuales encarar con garantías lo que nos esperaba.
Ah, no!!!. Que no habíamos pinchado aún!!!!.
Venga va, pues llegando a El Atazar el sr. Salmoral se encarga de que no falte de nada......
A las 21.00 horas llegamos a la plaza del pueblo que da nombre al famoso embalse de la Comunidad dónde nos recibe el sr. Ortiz con un abrazo y la mejor de sus sonrisas.
Primera parte completada!!!!!. 215 kilometrillos a la buchaca!!!!.
Cena disfrutona con el susodicho, explicación de lo sucedido y a buscar el alojamiento previamente concertado.
Duchas rápidas, recogida de comida necesaria para el día siguiente, cambio de bici (en mi caso) y al rato ya estamos distribuyendo camas y buscando la horizontal, no la de la Sierra, sino la de la cama.
Unos antes que otros deciden que por hoy viernes, ya está bien.........
