Mientras se encuentra en plena disputa la Vuelta a Suiza y tras e gratísimo sabor de boca dejado por el Dauphinè Libere, nos encontramos en plena época pre-Tour a falta de pocas semanas del inicio del mismo en Leeds.
Y tras las dos carreras anteriormente mencionadas que sin duda sirven como referencia obligada de cara a saber cómo llegan los favoritos, se han despejado muchas incógnitas de principio de temporada.
En primer lugar, y por suerte para el aficionado, parece ser que este año no habrá monólogo Sky. Al menos no como en los años anteriores.
Tanto Alberto Contador como Vincenzo Nibali parecen llegar en condiciones óptimas a la cita francesa. Y conociendo el carácter de ambos en la carretera, al menos hay garantías de ver espectáculo.
Otra cosa será cómo se desarrolle la carrera.
Froome no sale bien parado, ni mucho menos, del mini-Tour celebrado la pasada semana en tierras francesas.
A su pobre rendimiento deportivo debemos sumar la confirmación de que fue autorizado a utilizar inhaladores (corticoides) en el reciente Tour de Romandia.
Ojo, autorizado por el propio Director de Carrera (!!). Cosas de la élite, supongo.
Esta notificación coincidió con el peor rendimiento de Froome en la Dauphinè. Cosas del ciclismo, supongo.
El caso es que el ciclista con peor estilo encima de la bicicleta, al menos recientemente, y que no sabe dar pedales si no es mirando su SRM, llega con la confianza justa, firmando el peor inicio de temporada en su reciente trayectoria y viendo como su principal rival se encuentra, al menos, a su altura. Cosa que no se veía en los últimos años.
Porque si Contador, que parece haber recuperado su nivel pre-solomillo y lleva un inicio de temporada espectacular pese a la derrota in-extremis en Dauphinè, está en forma (quizás demasiado.... veremos cómo recupera de estos esfuerzos y qué tal llega al mes de julio), Nibali es el que despierta más ambiguedades.
O bien está midiendo escrupulosamente sus esfuerzos, amén de diferentes temas personales y deportivos en forma de nacimiento de su hija y caída de la bici respectivamente, ó está claramente un punto por debajo de los otros dos.
En Dauphinè, pese a intentarlo como él suele, apenas ha sido una sombra del ciclista que apabulló en el pasado Giro d´Italia.
Precisamente esos esfuerzos que hemos podido disfrutar por televisión son los que pueden pasar factura el próximo mes cuando los ciclistas encaren la última semana de la Grande Boucle.
Y detrás de ellos, el abismo.
Por mucho que nos quieran vender, que nos venderán, diferentes opciones ó la sorpresa anual en forma de escapada consentida ó demás, no hay actualmente ningún ciclista siquiera un peldaño por debajo de estos tres.
Cierto es que Talansky ha dejado muy buenas sensaciones en Dauphinè lo que unido a su juventud y a la fortaleza de su equipo (con un Hesjedal que posiblemente no volverá a ganar una Gran Vuelta pero sí que ayuda a otros a ganarlas por no hablar de la temporada de primavera que suele marcarse....) lo presentan como una alternativa a corto-medio plazo.
Otro que va camino de eterna promesa y ya vistió el maillot blanco de Mejor Joven en el Tour es Tejay Van Garderen.
Ganador de varias carreras de prestigio de una semana, su propio equipo sigue confiando en el neo-profesional Cadel Evans de cara a luchar por la general. El propio Evans está corriendo en Suiza sin guardarse nada......
Así como Jurgen Van Der Broeck, podio en Tour y Dauphinè pero siempre dejándose llevar, sin tomar iniciativa alguna y minimizando pérdidas en las etapas de alta montaña.
Únicamente dos jóvenes, Roman Bardet y Adam Yates, dejan una gratísima impresión acrecentada por su su juventud y descaro en la carretera. Han corrido como dos auténticos veteranos y peleado por la victoria siempre que han podido.
El primero sí acudirá a la cita francesa mientras que el segundo lo hará a la Vuelta Ciclista a España.
Y así podríamos seguir con una lista más que notable de ciclistas que podrían estar ahí, que seguramente harán Top-10 en los Campos Elíseos pero que juegan en otra liga.
Esperemos que al menos, y tras comprobar el año pasado gracias a Movistar en los Pirineos y este año en las diferentes carreras, que el equipo SKY es batible cien por cien, se decidan a animar la carrera y presentar alternativas valientes.
Terreno, del que hablaremos más adelante, tienen más que de sobras.
Saludos.
DavidP.
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